Como abogado experto en Derecho Concursal voy a resolver las preguntas más típicas, respecto a la operativa de la empresa y la administración de la compañía durante el concurso de acreedores.
¿Puede seguir funcionando la empresa que ha sido declarada en concurso de acreedores?
Sí, desde luego, y además con el interés de que por medio de su normal funcionamiento la empresa en concurso pueda satisfacer los créditos de sus acreedores. Y no debemos perder nunca de vista que el concurso de acreedores no es un castigo para la empresa que ha sido así declarada, sino una forma de satisfacer los créditos impagados sin tener que cerrar la empresa necesariamente.
La declaración de concurso, por tanto, no va a interferir de manera negativa ni a terminar per sé la actividad profesional o empresarial. Ése no es el objetivo de la declaración del concurso de acreedores. Y se pueden conseguir muchas cosas si te asesoras bien con tus abogados expertos en Derecho Mercantil. Por nuestra experiencia en el sector, sabemos que los errores salen muy caros en un procedimiento de este tipo y además no tienen posibilidad de repararse después.
Es importante que cuentes con el asesoramiento de un despacho de abogados especializado en derecho concursal, para resolver todas tus dudas respecto a la operativa de la empresa durante el concurso de acreedores y no cometer errores para los que luego no haya vuelta atrás.
¿Qué papel tienen los administradores de la empresa concursada?
Depende sobre todo del tipo de concurso de acreedores al que nos enfrentamos.
Si nos encontramos ante un concurso voluntario, el empresario concursado va a retener las facultades de administración y disposición, aunque bajo el control de la administración concursal, que decidirá en las cuestiones de la operatividad cotidiana de la empresa concursada. Los administradores ejercen la representación de la empresa, aun sometidas dichas facultades a la administración concursal.
En este caso del concurso voluntario, los administradores de la compañía podrán continuar la gestión de sus auditorías y cuentas anuales obligatorias, aunque siempre bajo el consentimiento y control de la administración concursal.
Si se trata de un concurso necesario, las facultades de administración y disposición sobre la masa activa quedarán entregadas a la administración concursal.
En todos los casos, la declaración de concurso no es impedimento para la cotidiana actividad empresarial. En el periodo entre la solicitud de concurso y la fecha en que la administración concursal asuma sus funciones, la dirección de la empresa concursada no podrá tomar decisiones fuera de las condiciones normales del mercado.
¿Qué ocurre con las liquidaciones y autoliquidaciones tributarias durante el concurso?
Sí, así es. Cuando se trata de un concurso voluntario, estaremos obligados por ley a presentar las declaraciones y autoliquidaciones tributarias, pero en este caso siempre bajo el control directo de la administración concursal. Si tienes dudas sobre alguno o todos los aspectos del concurso, no dudes en asesorarte con los mejores especialistas en Derecho Concursal de Mallorca. Te esperamos.
¿Cuál es la libertad de los administradores para emprender o continuar acciones legales con su empresa concursada?
Los juicios en trámite cuando se declare el concurso seguirán adelante, en ese juzgado instructor, hasta que se dicte sentencia firme.
Si estamos en el trámite del concurso voluntario, como para casi todo lo demás en cuanto la masa activa pueda verse afectada, es obligatoria la autorización de la administración concursal para la tramitación de demandas, recursos, litigios, etc., cuando tales procedimientos puedan tener efectos sobre la masa activa.
Y una vez declarado el concurso, las demandas civiles y laborales contra la empresa concursada deberán presentarse únicamente en el juzgado mercantil que tramite el procedimiento concursal.
¿Los administradores de la empresa concursal podrán seguir en sus puestos?
Los administradores de la empresa concursada se mantendrán en sus cargos si nos encontramos en un concurso voluntario. Sus honorarios quedarán fijados por la decisión del juez del concurso de acreedores y pueden variar muchísimo, en función de la dificultad de las tareas de administración que van a desempeñar, así como del volumen de la masa activa de esta empresa concursada.
La administración concursal, por sí misma o por propuesta de la empresa concursada, podrá suspender los contratos de sus ejecutivos. Inclusive podrá determinar los límites de la indemnización consiguiente.
Y el auditor de la empresa, de la misma manera, podrá seguir su actividad o ser sustituido por otro, siempre por instancia de la administración concursal, cuando el Juez del concurso lo considere correcto para la verificación de las cuentas anuales.
¿Se pueden ejecutar bienes de la empresa durante el concurso de acreedores?
No. Tampoco apremios administrativos, ni siquiera tributarios. Los bienes y derechos de la masa activa, desde la fecha de declaración de concurso, quedarán fuera de cualquier medida de este tipo, incluso si dicha ejecución o apremio ya estaba en trámite con anterioridad. Todos estos trámites quedarían en suspenso.
¿Qué ocurre con los intereses de las deudas contraídas por el concursado?
Que no se devengan desde la declaración de concurso salvo que sean créditos salariales e hipotecarios.
Un concurso de acreedores implica muchas situaciones y factores a tener en cuenta y las consecuencias de nuestras decisiones van a ser irreversibles. Por lo tanto, te recomendamos encarecidamente que recorras este enrevesado camino de la mano de un abogado experto en reestructuraciones e insolvencias.